RECREACIÓN DEL CRUCE DEL EBRO EN FAYÓN
El 25 de julio de 1938, las tropas leales al Gobierno democrático de la II República Española cruzaron el río Ebro en un intento de aflojar la presión que Franco ejercía sobre Valencia, dando comienzo la mayor de las batallas de la Guerra Civil Española. El 25 de julio de 2009, en el pueblo zaragozano de Fayón, uno de los afectados por los combates, tuvo lugar una recreación de este paso del Ebro por los republicanos, y de los primeros combates con el ejército rebelde.
Dentro de una serie de actividades que recuerdan la Batalla Del Ebro, la más vistosa es la recreación del cruce en barcas, igual que en el 38, y la posterior toma de las lomas cercanas, con el contrataque de caballería rebelde. Además de Frente de Madrid, de la que formo parte, muchas otras asociaciones de recreación participaron en los actos. En total, más de 200 recreadores, reproduciendo tropas de ambos contendientes, participamos en la actividad incluyendo nueve barcas de remos, caballería y con aviones de época sobrevolando el escenario, lo que resulta muy espectacular. un F-18 del Ejército del aire pasó varias veces sobre nosotros como homenaje que realizó la base de Zaragoza.
Aquí hay un enlace con unas cuantas fotos de la jornada, y muchas más en este otro.
La recreación, al igual que los museos, intenta reproducir los hechos de la manera más fidedigna posible, con especial atención a los uniformes, armas y equipo, alejándonos (al menos la mayoría) de posicionamientos políticos, que deben situarse en otras actividades. Nuestros "combates" siempre terminan con un abrazo entre los contendientes.
Por la zona hay varios museos referidos a la Batalla, y dentro del propio pueblo de Fayón, en la plaza, hay una exposición permanente de material y uniformes, que vale la pena visitar. También, en los alrededores de Gandesa, hay una zona conservada bastante bien de nidos de ametralladoras (posición de Mas De Grau), y un sistema defensivo de trincheras recuperado en La Fatarella (posición Les Devees). La página "espacios de la Batalla de El Ebro" ayuda bastante a informarse sobre los lugares que visitar y crear rutas para ver los escenarios de los combates.
Al volver, el lunes, visitamos las ruinas del viejo pueblo de Belchite, destruido tras la Guerra Civil. Realmente, el actual estado de las casas se debe en parte a la destrucción producida durante la Batalla de Belchite, pero mayormente, al abandono sufrido durante 50 años. Ahí eché de menos no haber conseguido aún el libro sobre El Viejo Belchite para crearme mi propia ruta guiada por las ruinas, y poder interpretar mejor lo que se ve. Es una visita impactante y sobrecogedora, y muy aconsejable.
Termino con la foto de un miliciano (aunque sea infantil) abrazado a dos miembros de un tabor de regulares, en la verbena posterior a la recreación.
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lolo -